martes, 29 de abril de 2014

Como elaborar un texto: técnicas

Escribir no es solamente un acto espontáneo, es un proceso. Se puede descomponer en una serie de actividades, pueden describirse y enseñarse. Es un proceso en el que no siempre reflexionamos y que consta de dos partes, una parte consta del código escrito y la otra es la composición del texto.

En primer lugar esta la planificación, la generación de las ideas, su organización, la redacción, la revisión y la presentación.

*La planificación: consta de dos partes, la distribución del tiempo, determinar cuales son las características del escrito, que vendrán dadas por los elementos de la situación de comunicación (destinatario, finalidad), es lo que se llama el problema retórico.

****El problema retórico: algunos lo describen como el conjunto de circunstancias que hacen que nos pongamos a escribir. El genero textual, (currículo, estancia, carta, reseña), cada uno tiene su propia organización y forma.
El escritor debe tener en cuenta su presentación y el receptor. Algunas preguntas interesantes son:

-¿Qué quiero conseguir con el texto?
-¿Como puedo enseñar mi propósito?
-¿Qué se de los receptores?
-¿Qué saben del tema que escribo?
-¿Qué impacto quiero causarles?
-¿Información?
-¿Cómo darla?
-¿Cuándo leerán el texto?
-¿Cómo quiero presentarlo?
-¿Qué imagen quiero dar de mi?
-¿En que tono quiero escribirles?

Y respecto al mensaje:

-¿Cómo sera?
-¿Largo o corto?
-¿Qué lenguaje utilizaré? ¿Culto o coloquial?
-¿Cuántas partes?
-¿Cómo me lo imagino?



-Es muy importante tener en cuenta la producción de ideas, que se puede hacer mediante diferentes técnicas:

 *Lluvia de ideas:  Consiste en decir varias ideas y colocarlas en una lista, para cuando empecemos a escribir, tenerlas allí escritas como muletillas.

**Racimo asociativo: Consiste en una serie de ideas relacionadas entre sí, que deben ser entrelazadas en un mismo texto (como una lluvia de ideas pero esta vez relacionadas) pueden conectarse por párrafos si hay temas diferentes.

***Método de la estrella: Se trata de resolver las preguntas: ¿Quién? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué? ¿Dónde? ¿Cuánto? ¿Cuál? ¿Qué?

****Método del cubo: Analizar, relacionar, comparar, argumentar, describir y aplicar.




Se pueden comparar las cosas con analogía, es decir con algo similar, explicando bien las causas, (el porque, comparación). También es importante la consecuencia, el precedente, la generalización, los ejemplos y la experiencia personal.


-Organización: empezamos haciendo un esquema, recopilando en el los puntos mas importantes del tema que vamos a hablar, lógicamente el esquema debe estar unido.
Es aconsejable hacer dos esquemas, en uno de ellos las fases mas importantes, la que de originalidad al texto.


-Redacción: debe tener en cuenta el esquema, aunque puede modificarse, muy importante la ortografía, la escritura, la gramática en si. Lo mas destacable es que hay que repasar tantas veces como sea necesario.

LEER

La lectura, un placer, una obligación, una necesidad..está presente en nuestro alrededor y quehacer diario. Es una riquísima fuente de comunicación utilizada por casi todo el mundo, forma parte de nuestro día a día y la utilizamos con diferentes finalidades.

Pasamos el día leyendo, el periódico, las revistas, Internet, anuncios en la televisión, carteles...etc.  Pocas veces somos conscientes de ello, y no le damos la suficiente importancia, aunque realmente es algo que constituye nuestra vida.  La lectura es un medio de comunicación riquísimo y además muy utilizado, gracias a ella estamos informados y conocemos los acontecimientos que se producen a nuestro alrededor. No solo nos transmite información sino que tiene la capacidad de aportarnos más que eso. Por ejemplo,  cuando alguien nos escribe una carta o un artículo de opinión, puede llegar a contagiarnos un sentimiento o pensamiento sobre lo que esta diciendo.

Para algunos, leer es aprender, la lectura es una fuente de información que nos permite adquirir conocimientos sobre temas concretos que por un motivo u otro deseamos conocer. Por ejemplo, cuando leemos un libro de cualquier asignatura de clase y tomamos nota de lo que hay escrito en él, estamos haciendo un uso de la lectura como instrumento de aprendizaje.


Sin embargo, puede ser muchísimo más,  el momento en el que abres el libro, te pierdes entre sus numerosas páginas, dejas atrás el problemático mundo que te rodea, tus inquietudes, tus frustraciones y complejos. Lo más sorprendente de la lectura, en mi opinión, es poder disfrutar de ella y del placer inmenso que te da. Sentarte un domingo por la tarde con tu libro favorito, para algunos la mejor compañía, y adentrarte en lo profundo de tus pensamientos dándole rienda suelta a tu imaginación y sumergiéndote, aunque sea por un momento en tu ‘paraíso artificial’.


lunes, 7 de abril de 2014

Consecuencias del maltrato infantil



Cuando el desarrollo de un niño se ve interrumpido o  se incumplen las tareas evolutivas por parte de los padres o cuidadores, surgen una serie de consecuencias y experiencias traumáticas para el maltratado. Estas consecuencias afectan directamente al niño, alterando así al  normal desarrollo de sus competencias.

Aunque no existe un perfil patológico específico asociado al maltrato, los niños y niñas maltratados suelen manifestar dos alteraciones de conducta, que suelen agruparse en torno a: una tendencia fácilmente perceptible, violenta y antisocial que exterioriza la tensión generando problemas a los demás; y una tendencia al aislamiento y la pasividad caracterizada por la interiorización del conflicto y que resulta más difícil de percibir. Estas dos tendencias no son incompatibles, pero determinadas condiciones del niño pueden aumentar la predominancia de una sobre otra. La interacción entre ambas tendencias suele hacer más probable la exteriorización antisocial en los niños y la interiorización en las niñas. 

La relación entre el maltrato infantil y dichos problemas conductuales se debe al deterioro producido en las tareas evolutivas básicas. Cuando un niño se desarrolla normalmente, las competencias adquiridas en los niveles básicos hacen posible la adquisición de competencias posteriores. En cambio, cuando dichas tareas evolutivas son deficientes obstaculizan el desarrollo de las siguientes. En el caso de estos niños maltratados, los efectos dependerán del periodo de desarrollo en el que se encuentre, la severidad, la frecuencia, el tipo de maltrato y las oportunidades para resolver las tareas evolutivas a pesar del maltrato.
Entre las tareas evolutivas críticas de la infancia deterioradas por el maltrato, se encuentran:
*El establecimiento de los primeros vínculos a través de los cuales se desarrollan las relaciones sociales.
*El establecimiento de la autonomía y la motivación de eficacia, a partir de la cual se desarrolla la capacidad para establecer objetivos propios y tratar de conseguirlos.
*El desarrollo de la interacción entre iguales, a partir de la cual se adquieren las habilidades socio-emocionales más sofisticadas.
A través de las relaciones que los niños desarrollan desde su infancia con los adultos encargados de su cuidado, adquieren los modelos básicos a partir de los cuales aprende lo que se puede esperar de uno mismo y de los demás; de gran relevancia en la regulación de sus emociones y conductas. La formación de estos modelos es una tarea evolutiva muy importante, a partir de la cual se pueden explicar la relativa continuidad que suele existir entre la calidad de la relación que los niños establecen desde la primera infancia y la calidad de las relaciones que se establecen en edades posteriores. Para favorecer el desarrollo positivo, es preciso proporcionar al niño experiencias de interración con el adulto que le ayuden a aprender a: confiar en si mismo y en los demás; a predecir, interpretar y expresar lo que sudece; asi como estructurar de forma consistente su comportamiento en relación al comportamiento de los demás.
Pero cuando el niño es maltratado existen una serie de obstaculos que le impiden dicho aprendizaje. Entre ellos:
*La privación emocional, cuando los adultos responsables del niño no estan psicológicamente disponibles para atenderlos, condición que si se hace persistente es llamada abandono emocional, originando a los niños cierta tendencia a la pasividad, dificultades de aprendizaje y falta de sensibilidad social.
*La ausencia de relaciones estables y previsibles, cuando el niño carece de figuras de apego estable con las que establecer un apego seguro o cuando son tratados de forma imprevisible y contradictoria originando indefensión e inseguridad, e impidiéndole aprender a estructurar su conducta de forma coherente en relación a la conducta de los demás.
*La relación coercitiva como esquema racional básico, orientado al control y al dominio a traves de formas de abuso (emocional y físico), suele orginar una tendencia en el niño negativista y antisocial, de resistencia a los demás, dando lugar a conductas agresivas, similares a las que los adultos han utilizado con el, o bien al contrario, una tendencia a la sumisión absoluta.
En cuanto al logro, motivación de eficacia y la orientación de las tareas, es la motivación que tiene el niño por triunfar, por influir en el entorno que le rodea, y esta motivación va ligada a las interacciónes que establece en el sistema escolar. Estos logros se alcanzan cuando una serie de objetivos planteados son alcanzados de forma independiente, cuando estos objetivos son cumplidos los cuidadores les alientan y les reconocen de forma consistente, interiorizando asi los mensajes positivos que transmiten. Todo ello hace que el niño despierte su deseo de aprender por si mismo, la motivación de un logro y que se enfrente a situaciónes con seguiridad y eficacia. Sin embargo, en el caso de los niños maltratados, se produce un efecto contrario, cuando los intentos de dominio independiente son negativos o los cuidadores por su parte manifiestan rechazo hacia dichos intentos o lo inhiben.  Esto desencadena haciendo que el niño no desarrolle su autonomía, tenga dificultad para tomar decisiones y responda ante las dificultades con inseguridad e ineficacia al anticipar resultados negativos y carecer de pautas adecuadas para controlar su propia conducta.
Es verdaderamente importante la capacidad para relacionarse con nuevos adultos y la motivación de eficacia para lograr una capacidad de adaptación fuera del entorno familiar. Es tan importante hasta el punto de ser considerada una de las principales causas de dificultades de aprendizaje.
La interacción con los compañeros y desarrollo de la competencia social. Con los adultos se produce el primer tipo de relación como consecuencia de la cual se adquiere la seguridad o inseguridad básica. Los compañeros comienzan a influir en el desarrollo un poco después y a través de complejas interacciones estimulan el desarrollo de las habilidades sociales más sofisticadas necesarias para un adecuado desempeño en el papel de adulto.
 Con los iguales se aprende un importante principio social muy importante para relacionarse que no te pueden eseñar los propios adultos. Hay situaciones en las que el grupo no las cumple adecuadamente: porque no hay oportunidades de que estos se relacionen; cuando interactuan sin tener la capacidad para tener relaciones entre iguales o cuando las relaciones entre iguales les sustituyen a las relaciones con adultos (porque el niño carece de oportunidades de tenerlas). 

Los profesionales que se encuentran en la escuela no presentan dificultad en detectar el maltrato. Las conductas adoptadas por los niños son fácilmente observables diariamente y a lo largo del curso escolar. La posibilidad de comparar esta conducta con la de los demás niños esta al alcance del profesor, tambien podemos observar la interacción que tiene el maltratado con su familia.
Estudios demuestran que el profesorado a la hora de detectar un caso tienen serias dudas para inferir a partir de lo que observan, en función de lo cual puede explicarse que con frecuencia no informan de estos casos de riesgo, debido al miedo a equivocarse y a las posibles consecuencias negativas del error.  La inseguridad y falta de información sobre cómo comunicar lo que observan;  las posibles consecuencias legales que podría tener el hecho de equivocarse, asi como el deterioro de las relaciones entre los padres y el niño.
Para prevenir el maltrato infantil, curar a los niños y a las niñas que lo han sufrido de sus destructivos efectos, conviene situar la intervención a distintos niveles, orientándola en torno a los siguientes objetivos:
*Desarrollar la conciencia de los derechos de los niños y las niñas y su necesidad de protección, incluyendo en este sentido la necesidad de sustituir el castigo violento por otras formas alternativas de disciplina, basadas en la comunicación, que les enseñen a respetar ciertos límites y controlar su propia conducta.
*Erradicar las condiciones de pobreza y la exclusión social en las que viven en determinadas familias.
*Mejorar la capacidad educativa de los padres y las madres para garantizar un cuidado atento y adecuado, una relación afectiva cálida y una disciplina consistente.
*Mejorar la calidad de la vida familiar, promoviendo actividades que inviten a la interacción entre padres e hijos.
*Desarrollar alternativas a la violencia reactiva y a la violencia instrumental.
*Enseñar a rechazar la violencia, incompatible con la permisividad.
*Enseñar a respetar límites a través de procedimientos no violentos.
*Desarrollar condiciones protectoras que ayuden a romper el círculo del maltrato, promoviendo relaciones basadas en el respeto mutuo.
*Proporcionar a los niños y niñas que han desarrollado modelos básicos negativos, experiencias de interacción con adultos que tengan adecuada disponibilidad psicológica. Con estos pueden aprender a confiar en si mismos y a interpretar y predecir emociones asi como a estructurar su comportamiento en relación al de los demás.
*Enseñarles a orientar la conducta hacia la consecución de objetivos constructivos, orientandoles a plantearse objetivos, afrontar el éxito o el fracaso.
*Prevenir la exclusión social de los niños maltratados, ayudándoles a establecer relaciones adecuadas con sus compañeros.

Todas estas pautas de actuación son las que pueden ayudar a que el niño maltratado se integre en la sociedad y tenga un buen desarrollo en su crecimiento. Conviene enseñarles a ponerse en el lugar de los demás, colaborar desde la igualdad, expresar aceptación y reducir las frecuentes conductas de rechazo que suelen expresar, pasar a formar parte de una clase homogénea.






BIBLIOGRAFÍA
DÍAZ-AGUADO, M.J. El maltrato infantil. Revista de Educacion, núm 325 (2001), pp. 143-160 (Consultado el 18 de Noviembre)


Dificultades de aprendizaje en el aula de primaria



Las dificultades de aprendizaje en el aula,  son un fenómeno cada vez mas frecuente en el ámbito de la docencia. Por ello he decidido hablar sobre este tema, ya que considero que deben tenerse en cuenta todos los inconvenientes que puedo encontrar cuando ejerza mi futura profesión. Puede ocurrir que el profesor a veces se sienta desmoralizado, impotente e incluso incapaz de hacer frente a la situación, pero debemos tener en cuenta varios recursos para poder afrontar dicho problema.

Cuando detectamos un problema en el alumno, lo primero que debemos hacer es localizarlo e intentar averiguar cual es su causa. Puede estar ligado a diferentes variables: familiares, escolares, sociales o individuales. Los problemas de distracción, concentración, control de impulsos y nivel de actividad son frecuentes entre los que tienen trastornos de comportamiento o desarreglos emocionales.



Es necesario un diagnóstico definitivo que debe incluir pruebas físicas, intelectuales y psicológicas que demuestren habilidades y deficiencias, Una vez detectada una dificultad,  debe ser transmitida a un especialista (de Pedagogía Terapéutica, Audición y Lenguaje, Equipo de Orientación Psicopedagógica…) para hacer una valoración de las dificultades de aprendizaje y establecer las necesidades del alumno. A continuación es necesario ponerse en contacto con los padres, tienen un papel fundamental en el desarrollo de las capacidades de su hijo. Es necesario que éste sea estimulado también con la tarea fuera del horario escolar. El trabajo conjunto de la familia y el centro  puede reforzar y facilitar la labor del docente, mejorar las expectativas del desarrollo intelectual del niño e incrementar su esfuerzo.


Analizando las opciones a las que podemos recurrir cuando nos encontramos en este caso, llegamos a barajar tres posibilidades. La repetición de curso sería la primera, el alumno no consigue alcanzar el ritmo de clase, de acuerdo con los criterios académicos. Aunque en mi opinión, no es una buena opción, ya que el alumno al repetir curso se siente impotente y desmoralizado, incluso tiende al fracaso escolar. 


La derivación, consiste en ser escolarizado en un Centro de Educación Especial, si se considera que el alumno debe ser atendido más específicamente, con servicios complementarios (logopedas, psicólogos, cuidados asistenciales..etc.)


Y por último el apoyo, es un refuerzo complementario, en el caso de que el alumno consideremos que no debe repetir curso. Como una medida para evitar la repetición, el alumno puede recibir una ayuda por parte de un especialista, asistiendo a clase en determinadas materias, aunque algunos contenidos deben ser trabajados en pequeños grupos. 


 Para que el alumno pueda optar a estas clases de apoyo, lo primero que debemos hacer es el proceso de la adaptación curricular; que puede ser significativa, cuando el desfase del alumno es superior a dos años de retraso, o no significativa, si el desfase del alumno es inferior a dos años.  Se tratan de medidas fáciles de aplicar, no exigen grandes recursos, sino un buen sentido didáctico y una flexibilidad por parte del profesor.  Nuestro objetivo es hacer de las actividades diarias, instrumentos que le ayuden a aprender, a avanzar desde el nivel en el que se encuentra el alumno. El niño ha de desarrollarse a la velocidad que sus capacidades le permitan, no podemos exigirle más de lo que el puede darnos. Para ello hemos de disponer de una estrategia de trabajo, sencilla y eficaz, para adaptar las actividades con facilidad y de manera sistemática.

En una adaptación no significativa no se modifican, eliminan y/o añaden objetivos, contenidos y criterios de evaluación. Sí se modifica la metodología de trabajo y actividades. Sin embargo, en una adaptación significativa, se modifican, eliminan contenidos, objetivos y criterios de evaluación. A continuación voy a como deben de llevarse a cabo estas adaptaciones del currículo:


Normalmente los alumnos con dificultades de aprendizaje, tienden a entorpecer el funcionamiento del aula y requieren una atención específica. Los alumnos pueden recibir esta atención por parte del profesor especialista de apoyo  dentro del aula ordinaria o fuera, en pequeño grupo o de  forma individual, atendiendo a las dificultades del alumno y a las características del grupo clase.   


Para ofrecer una clase de apoyo primero debe tenerse en cuenta el nivel del alumno y las capacidades que este puede cumplir,  a partir de un análisis previo de sus conocimientos, para saber la familiaridad que tiene con el tema. Para ello puede someterse al alumno a una serie de preguntas orientativas o interactuar con él sobre temas que susciten a la proyección de conocimientos previos sobre el temario. 


Tras el análisis de conocimientos previos, llega la adaptación de los contenidos sobre el temario. Las medidas que vamos a tomar están orientadas a la individualización, es decir, la creación de un plan de estudios individual al alumno. Para llevar a cabo nuestro fin hay que modificar  el nivel de complejidad, para ello es necesario: suprimir parte de los componentes de la tarea, segmentarla y presentarla gradualmente, proporcionar un plan de trabajo y facilitar el procesamiento de datos gradualmente.



Para suprimir parte de los componentes de la tarea, nos centramos en contenidos más básicos, eliminando los contenidos de menor importancia y aumentando la cantidad de práctica en los esenciales. Así creamos una especie de ‘escalera’ para que el alumno construya su conocimiento desde una base que es fundamental. Por ejemplo: si el alumno no sabe realizar una multiplicación de dos cifras, empezaremos por reducir los contenidos y enseñarle a hacer una multiplicación simple.



Segmentar la tarea y presentarla gradualmente no consiste exactamente en eliminar los contenidos, sino en transmitirlos de forma pausada y asegurándonos de que el alumno ha comprendido los contenidos presentados antes de pasar a la siguiente cuestión. Por ejemplo: proceder a la lectura de un texto por párrafos, asegurándonos de que el alumno ha comprendido el primer párrafo antes de pasar a leer el segundo. Resulta una estrategia muy efectiva para niños fuertemente impulsivos, con poca capacidad de mantenimiento de la atención o muy poco autónomos en la resolución de tareas.



Facilitar el procesamiento de datos gradualmente, no tiene como objetivo disminuir la complejidad objetiva de la tarea, sino que busca facilitar el procesamiento que el alumno hace de ella haciendo que trabaje con pocos datos en cada proceso, pero sin modificar la presentación prevista. De este modo los alumnos irán centrando su atención en un solo dato cada vez, pero finalmente habrán completado satisfactoriamente toda la tarea.



Proporcionar al alumno un plan de trabajo individualizado, un método o estrategia para que afronte la tarea que le proponemos, ayudándole así también a mejorar su déficit estratégico como estudiante a la hora de resolver sus tareas de forma autónoma. De lo que se trata es de enseñar al alumno planes de resolución de tareas que él deberá adaptar y reelaborar a partir de la práctica. El niño con discapacidad, si quiere llegar a adaptarse y cumplir los objetivos mínimos, debe esforzarse más que los niños con capacidades ‘normales’, para ello, opino que estos alumnos deberían esforzarse también fuera del horario escolar.



Para plantear una actividad adaptada, debemos de hacer un análisis de las variables contextuales, que implican unos cambios en las rutinas cotidianas sobre las que tenemos absoluta libertad de decisión. Nos vamos a fijar en la tarea, el alumno y el contexto del trabajo.  A la hora de plantear una actividad hemos de tener en cuenta, el nivel de abstracción y de complejidad, la modalidad o lenguaje de presentación, la respuesta que se espera, la familiaridad que tiene el alumno con el tema, los procesos de tarea, el tipo de agrupamiento y el tiempo.



El nivel de complejidad viene definido por la cantidad de unidades de información y relaciones existentes entre esas unidades y el nivel de abstracción se define como la distancia que hay entre un acto mental y el objeto o suceso sobre el cual se opera. Ambas variables interactúan a la hora de hacer una actividad determinada más o menos difícil para un alumno dado por lo que resulta conveniente preparar una versión modificada de la misma en la  que uno de los dos parámetros se mantenga pero que el otro se disminuya. Por ejemplo: si a un alumno le cuesta sumar, o restar, podemos acompañarlo con una representación gráfica, lo que disminuye el nivel de abstracción del tema.



Es importante tener en cuenta la modalidad o el lenguaje de presentación, consiste en adaptar el lenguaje utilizado en la materia a las capacidades cognitivas que tiene el alumno. No se trata de cambiar el contenido del mensaje sino de adaptar el lenguaje con el que se expresa haciéndolo menos abstracto para el alumno. Por ejemplo: si el alumno no entiende una definición de un objeto, trataremos de explicárselo con un lenguaje más sencillo para que aprenda el significado.



La planificación de la tarea es muy importante ya que estos alumnos pueden presentarnos varios ‘inconvenientes’ o entorpecimientos a la hora de impartir la clase. Debemos tener en cuenta el tipo de agrupamiento, se refiere a como se ha pensado desarrollar la actividad ( si en grupos, parejas..) En cualquier caso se trata de analizar si el tipo de agrupamiento y la modalidad de trabajo elegidos son los mas idóneos para el contenido concreto que vamos a trabajar y el objetivo que perseguimos. Por ejemplo: si nos enfrentamos a una actividad de comprensión de textos es preferible dividir a los alumnos por parejas, hacemos así de la actividad un ejercicio de cooperación.



Debemos tener en cuenta también el tiempo previsto para la actividad, aunque en esta situación es difícil calcularlo, es frecuente que muchos de los alumnos tengan problemas ya que precisan más tiempo que sus compañeros. En este caso, el tiempo es una variable a la que no debemos ceñirnos demasiado y si lo hacemos puede entorpecernos a la hora de hacer un plan de estudios. En mi opinión, no deben planificarse los contenidos, es el alumno quien debe marcar el ritmo de la clase en cuanto al avance de la materia.



El profesor debe transmitir al niño algo más que conceptos e información, también entra dentro de sus responsabilidades preparar a los alumnos para utilizar sus conocimientos por su cuenta, y adaptarlos a la vida real.  Una forma de hacerlo es con los deberes, a través de ellos, los alumnos desarrollan sus conocimientos trabajando de forma independiente. Actualmente es muy frecuente la queja de los padres hacia los profesores sobre las actividades que los niños deben hacer en su casa, pero realmente desconocen que es muy importante que el niño se desenvuelva fuera del entorno escolar y sepa afrontar sus responsabilidades y deberes. En los niños con dificultades, es fundamental el papel de los padres (o algún otro tipo de apoyo o ‘repaso’) para que les ayuden con la dificultad de la materia si ellos no pueden por si solos, como con la estimulación a hacer sus deberes.



Los niños con dificultades, difícilmente pueden cumplir con la misma tarea que mandamos para el resto de la clase ordinaria. Por ello, seria injusto que los niños con dificultades tuvieran los mismos deberes que los del resto de la clase. Hay que poner deberes que supongan un estímulo, nunca hay que poner deberes que discriminen su inteligencia por ser demasiado difíciles. No debemos olvidar que el niño debe esforzarse en ellos. Hay que poner énfasis en mejorar la rapidez. Por ejemplo: un niño es capaz de hacer 5 problemas de matemáticas en 10 minutos, mientras que el niño con dificultades le cuesta el doble de tiempo.



Si un aspecto de la materia todavía se está impartiendo, y el alumno todavía tiene problemas con él, no debería practicarse sin la supervisión del profesor. Es necesario que los deberes que le mandamos al alumno sean tareas que él pueda completar con seguridad y éxito. Así el alumno a la hora de realizar las actividades se dará cuenta de que las clases han sido productivas y que él por si mismo puede llevarlas a cabo de forma autónoma.



Los exámenes dan la oportunidad al alumno de que refleje y demuestre todos los avances y conocimientos que ha adquirido. Esta imagen clara del desarrollo, les permite a ellos también darse cuenta de sus avances. Cuando el alumno con dificultades, supera un examen, obtiene un sentimiento de victoria que hace que adquiera la confianza suficiente para afrontar el siguiente.



Si a los alumnos con dificultades de aprendizaje, no se les ha impartido la misma parte de la materia que al resto, sería injusto evaluarles de la misma forma. Una manera fácil de adaptar el examen sería ajustando y eliminando los puntos que no ha estudiado y ajustando la puntuación en consecuencia. Como ya hemos dicho antes, los niños con dificultades de aprendizaje no tienen la misma rapidez en resolver las preguntas, así que debemos diseñar un examen que se adapte a sus capacidades de resolución. Con estos métodos se consigue eliminar la precisión social que hay entre los niños que quieren acabar en cuanto antes para salir al recreo o jugar.



Finalmente a la hora de evaluar y calificar al niño debemos tener en cuenta diferentes aspectos. Podemos dar una doble calificación, es decir, evaluar el esfuerzo y progreso a nivel de conocimientos. El nivel de dificultad debe indicarse a parte de su nota. Por ejemplo: Notable/3. Otra forma sería la no calificación, ya que a veces resulta imposible la evaluación de este tipo de alumnos en alguna asignatura. De esta forma, la calificación en el boletín aparecería como ‘no-calificación’. Y como última opción el informe escrito, que detalla con una explicación el progreso del niño con dificultades en un breve párrafo escrito. Así el profesor puede explicarse siendo justo y sincero. En este informe escrito podemos poner los deberes realizados, los resultados de los exámenes, las adaptaciones realizadas, los conceptos asimilados...etc.



Todas estas son las adaptaciones curriculares más importantes que deben llevarse a cabo cuando nos encontramos con un caso igual o semejante en el aula. No son medidas que requieran mucha dificultad, aunque si requieren mucha constancia y seguimiento. Es muy importante que se tomen medidas para que el niño poco a poco consiga cumplir sus objetivos mínimos sin llegar a la desesperación o el abandono de los estudios.